
El proyecto de investigación “Diseño y modelación de muros formados por botellas de tereftalato de polietileno rellenas de arena y reforzadas con acero corrugado”, desarrollado por el ingeniero Alexander Solarte Benavides y financiado por la II Convocatoria de Innovación y Desarrollo Tecnológico 2022 de la Universidad Santo Tomas, propone el estudio de la capacidad de carga de las viviendas con las botellas ubicadas de manera vertical con el objetivo de aprovechar sus propiedades geométricas y aumentar la resistencia a la compresión. Con el uso de las botellas de manera vertical, los muros pierden estabilidad lateral, por tal motivo se propone el uso de una barra de acero en dirección vertical, ubicada en el centro del muro con una separación cada metro para brindar la rigidez lateral en el sentido débil del muro.
La idea de utilizar botellas PET en la construcción de edificaciones fue concebida originalmente por Eco-Tec Environmental Solutions para ayudar a lidiar con el calentamiento global y crear menos residuos en el medio ambiente. Sin embargo, este sistema de construcción no se ha presentado en masa hasta el momento, debido a que generalmente solo se construyen viviendas de un piso y con las botellas ubicadas de manera horizontal. El hecho de ubicar de esa manera las botellas, implica el no aprovechamiento de sus propiedades geométricas, ya que las botellas se ubican para que trabajen a compresión en su sentido débil, por tal motivo no generan la resistencia requerida para brindar seguridad a sus ocupantes.
La Universidad Santo Tomas aprobó la construcción de una estructura de pruebas conformada por botellas de plástico rellenas de arena para incentivar este tipo de construcciones de bajo costo, que garantizan la seguridad a sus ocupantes y reducen la contaminación ambiental gracias al reciclaje.